Con una fórmula rica en nutrientes esenciales, esta crema está diseñada para reconstituir, tonificar y devolver vitalidad a la piel, especialmente cuando se ve apagada, deshidratada o fatigada. Su acción fortalecedora estimula las defensas naturales cutáneas y mejora visiblemente la lozanía, elasticidad y salud general del rostro.
Gracias a su combinación de lípidos, vitaminas, proteínas y antioxidantes, esta crema actúa como un refuerzo integral para la piel, ayudando a equilibrar sus funciones y a protegerla del estrés ambiental.
Activos principales:
Coenzima Q10 (Ubiquinona): antioxidante que estimula la producción de energía en las células. Ayuda a reducir los signos del envejecimiento y a proteger la piel del daño oxidativo.
Proteínas de suero: fortalecen la estructura cutánea, aportan elasticidad y mejoran la capacidad de regeneración. Ricas en aminoácidos esenciales, nutren en profundidad.
Ginkgo Biloba: mejora la microcirculación, potencia la oxigenación de la piel y actúa como antioxidante. Revitaliza y da luminosidad.
Licoriza: conocida por su acción calmante y antiinflamatoria. También ayuda a unificar el tono de la piel y mejorar la apariencia de manchas leves.
Té verde: potente antioxidante natural. Protege frente al envejecimiento prematuro causado por radicales libres y ayuda a calmar irritaciones.
Corteza de uva: rica en polifenoles y resveratrol. Protege contra el estrés oxidativo y mejora la firmeza de la piel.
Alfa Bisabolol: con propiedades calmantes y regeneradoras, ayuda a reducir la inflamación y mejora la tolerancia en pieles sensibles.
Palmitato de Vitamina A: derivado estable de la vitamina A con acción regeneradora. Estimula la renovación celular y contribuye a mantener la piel suave y uniforme.
Vitamina E: antioxidante que protege la piel del daño ambiental. Ayuda a mantener la hidratación y refuerza la barrera cutánea.
Modo de uso: ideal para aplicar a diario, con suaves masajes en rostro y cuello, como parte de una rutina de hidratación completa.
Presentación: pomo 70 gr.
